Adelaide Alsop Robineau fue una gran figura en el movimiento cerámico; no solamente fue una gran ceramista, sino que también se interesó en dar a conocer ampliamente las ideas y las técnicas.
En 1899 comenzó la publicación, haciéndose editora del Keramic Studio, una revista destinada principalmente al ceramista aficionado.
Artículos del ceramista francés Taxile Doat, sobre la realización de porcelana, la estimularon a tentar su suerte y comenzó a dar clases con Charles Binns, uno de los maestros líderes de su tiempo, en la Alfred University, donde se daban clases desde 1901.
Las vasijas estaban decoradas principalmente con incisiones y tallas, realzadas con vidriados mates cristalinos, de calidad parecida a las joyas. Su mayor éxito fue la recompensa con el Gran Premio por las 55 piezas presentadas en la Exposición Internacional de Arte Decorativo de Turín, en 1911.