Castiglione y las virtudes del caballero renacentista

 

Baldassare Castiglione fue un noble italiano nacido en Casatico di Macaría en 1478 y muerto a causa de la peste en Toledo, España, en 1 529, un año después de la publicación de El cortesano, escribió un verdadero tratado moral y estético de los ideales del Renacimiento.

En la línea señalada en De civilitate forum puerilium, libro en el que Erasmo de Rotterdam reivindica un código de "buenos modales" como parte de su proyecto humanista, Castiglione, hombre de vasta cultura y estrechamente ligado a los centros de poder, elabora El cortesano, que se convierte, según A. Qondan, en la "gramática fundamental de la sociedad cortesana".

Pero a diferencia de la obra de Erasmo, la de Castiglione responde a las exigencias de una sociedad jerarquizada, en la que cada clase social ha de tener una codificación propia que haga visible sus condiciones de vida y las distancias que las separan.

Acaso para remarcar más estas diferencias interclasistas, El cortesano está concebido no como un clásico manual de urbanidad, sino como un diálogo natural entre dos personajes de la corte del duque de Urbino acerca de los valores y de las reglas de la vida social.

De la conversación se deduce que las cualidades del perfecto cortesano se sustentan en el cálculo y el éxito sociales y en la "gracia", es decir, el don de todo aquel elegido por nacimiento, pues para Castiglione, la excelencia cortesana, a diferencia de lo que afirmaba Erasmo, no se aprende.


Portada de El cortesano
Portada de El cortesano, obra de Baldassare Castiglione publicada en 1528.