El despertar de Malinas

 

Malinas conoció su época de mayor esplendor entre los siglos XV y XVI, durante un período de gran prosperidad, además, para los Países Bajos, que en aquellos tiempos debían su riqueza al hecho de que se habían convertido en una importante potencia comercial. De este modo, el centro de la vida política, económica y social pasó de Amberes, que era la ciudad en la que tradicionalmente se había concentrado el poder y que siguió siendo un centro de gran importancia, a Malinas, población situada al norte de la región de Flandes y que se había caracterizado por su vida tranquila.

De esos años en los que la ciudad cobró tanto protagonismo cabe destacar, asimismo, que algunas de las figuras más relevantes e influyentes fueron mujeres, algo no demasiado habitual en la Europa de aquella época.

Precisamente fue Margarita de Austria, a la sazón gobernadora de los Países Bajos, una de las grandes promotoras de la ciudad de Malinas. En la plaza Mayor se levanta una estatua en honor a ella, gran amante de la cultura, que tanto luchó por conseguir que Malinas se convirtiera en uno de los centros artísticos de referencia de Europa.

Ella fue una valiosa mecenas para un buen número de artistas que acudieron a la ciudad cuando la población era la capital de los Países Bajos. Por otro lado, otra Margarita, en este caso Margarita de York, también fue una importante mecenas artística y jugó un papel clave en la vida política de la época.

Solemne sesión inaugural del Parlamento de Burgundia
Solemne sesión inaugural del Parlamento de Burgundia en la ciudad de Malinas, el 3 de enero de 1474, por Jan Gossaert (Ayuntamiento de Malinas).