En el norte, el período primitivo o formativo, desde 1200 a.C., hasta aproximadamente el nacimiento de Cristo, muestra la primera época de la cultura mochica, centrada en los valles costeros del norte, sobre el río Chicana.
La cerámica Chavín, hecha alrededor del 800 a.C., se caracteriza por las vasijas en forma de calabaza de pasta blanca o anteada, a veces decorada con incrustaciones rojas, y coronadas por un asa en estribo.
A menudo se aplicaba a la cerámica pintura resinosa, para hacerla impermeable. Se utilizó la pintura en negativo, así como la decoración incisa.
El asa en estribo se convirtió en una característica significativa del último trabajo mochica hecho en esta zona, y se llama así por su parecido a un estribo de montar y proporciona tanto un asa para el transporte cómodo, como un caño eficaz para beber o verter, al mismo tiempo que protege el contenido del polvo y la contaminación.