La arquitectura


En las Galias, el monumento más famoso de esta época fue la iglesia que sobre el sepulcro de San Martín construyó su devoto sucesor en la silla episcopal, Gregorio de Tours. Este último escribió en versos épicos la descripción de su propia obra, a la cual acudían ya en su tiempo peregrinos de todas las Galias. La descripción de la basílica de San Martín es, sin embargo, desmasiado vaga para poder deducir cómo fue su forma primitiva.
Edificios auténticos de esta época quedan pocos en Francia. Entre los mejor conservados está el baptisterio de San Juan de Poitiers. Las bóvedas están sostenidas sobre columnas de fustes procedentes de edificios romanos, y los capiteles, cuando no son antiguos, quieren imitar el capitel corintio; no obstante, en el modo de labrar las hojas (a doble bisel) se advierte un espíritu distinto del de los marmolistas romanos. En el exterior de San Juan de Poitiers se observan las tentativas hechas para imitar las cornisas de los frontones clásicos, pero la decoración es de piedras de diferentes colores formando un mosaico, al estilo de los típicos esmaltes de las joyas bárbaras. Estas joyas se ven también imitadas en los relieves, como en una placa con una águila de la iglesia de Vence, que ha sido copiada de las fíbulas; otros relieves hay también con animales y pájaros, pero sobre todo dominan las rosetas y racimos de la tradición oriental siríaca, ya anteriormente introducida en occidente.
Al mismo siglo VII pertenecen la basílica de San Pedro de Vienne y la cripta funeraria de Jouarre. La primera (reformada en el siglo IX y, después, en la época románica) aún conserva de los tiempos merovingios los paramentos de los muros laterales con dos órdenes de columnas superpuestas. La cripta de Jouarre (cerca de Meaux) es una iglesia funeraria bien conservada que aún guarda, en su emocionante espacio cuadrado, las tumbas de las primeras abadesas del monasterio al que pertenecía y el sepulcro de su constructor: el obispo Agilberto.
Por lo que toca a la escultura, quedan en los países ocupados por los bárbaros unos sarcófagos que reproducen con relieves los primitivos tipos cristianos en un estilo seco, sin vida, y con las figuras talladas en planos o en haces de líneas paralelas. Son también rarísimos los relieves en marfil ejecutados por artistas teutónicos. Ejemplar franco importante es el cofrecillo con escenas de la leyenda de Sigurd (Sigfrido) e inscripciones rúnicas anglosajonas, realizado en colmillo de narval. Parece datar del siglo VIII y una parte de él se conserva en el Museo de Florencia y otra en el Museo Británico.




Palacio de Teodorico
Palacio de Teodorico (Ravena). Con una estructura que pretende imitar el palacio ciudadano romano, se levanta sobre dos pisos siendo el inferior destinado exclusivamente al uso administrativo. El superior consta de grandes ventanales que aireaban amplios salones para fiestas y reuniones gubernamentales.